Pocas personas hay que ignoren el gran éxito de la serie de fantasía maquiavélica que está partiendo la pana en todo el mundo. Una tía mía que se metió a monja, estoy seguro de que no ha oído hablar de ella, y hay un vecino con el que quise sacar el tema cuando coincidimos en el ascensor y no sabía de qué le estaba hablando, pero, aquí entre nosotros, es un hombre embrutecido que sólo piensa en beber y en mujeres. Por lo que sé, el cura de mi pueblo tampoco debe tener mucha idea, y menos posible aún es que la tenga desde que le nombraron redactor jefe de "El Mundo Deportivo", con lo absorbente que debe de ser eso. Además, hay muchos marineros que cuando van en esos pesqueros a lo "Capitán Iglo" de expedición por los mares del Sur pescando palitos de merluza con sus manos desnudas, en vez de ponerse a leer este género de historias dedican sus horas, en una muestra de corpororaritivismo, a "Moby Dick", "El Viejo y el Mar" y "Capitanes Intrépidos"
Todo esto viene a cuento de que Martin Georgetown, del que todo el mundo sabe (quitando a mi tía monja, mi vecino borracho, etc, etc) que es un apasionado de la cultura hispana pues no en vano vive en Santa Fe (la que queda al lado de Granada no, la que hay en Nuevo México), está preparando una versión orientada al público español de su serie de novelas aprovechando las especiales características de nuestra querida España, esa España tuya, esa España nuestra/negra/vieja (elíjase la rima de la canción de Cecilia que más plazca o plugue al lector)
En la portada se prevé retratar un gran toro de Osborne ante el que bailan muñeiras personajes ataviados con armas blancas típicas españolas: facas, trabucos, ...(Como me he entretenido viendo el DVD "Bienvenido al Norte", no me va a dar tiempo a acabar la noticia, que mañana quiero madrugar, no sea que me llamen la atención en el trabajo. Hala, felices sueños)
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